Historia de la fotocopiadora

Si necesitas hacer fotocopias en Alcobendas en un sitio de confianza y a buen precio, no dudes en visitarnos. Nuestro compromiso es la calidad... y proporcionarte información de interés en este post. Hoy nos vamos a acercar a los orígenes de la fotocopiadora para revelar su historia.

La fotocopiadora como medio impreso tiene sus orígenes en Gutemberg. Hasta entonces los contenidos eran manuscritos manuales. 

Ya en 1867, la aparición de la máquina de escribir aumentó la posibilidad de duplicar originales, pero realmente el modo de reproducir los documentos se basaba en la fotografía o la mimeografía. Lo habitual era utilizar papel carbón para "calcar". 

En 1903 el norteamericano Beidler descubrió la forma de hacerlo por revelado instantáneo de un negativo fotográfico y llegó a patentar esta técnica tres años más tarde. Este revelado dio lugar a las primeras fotocopias, aunque se parecían más a una fotografía que a una fotocopia tal y como hoy la entendemos.

En 1938, Chester Carlson, hizo la primera copia en papel a través de un sistema llamado xerografía. Este término viene del griego xeros (seco) y graphos (escritura), y significa impresión o escritura en seco. Con esta técnica se empezó a usar el papel común. Años después, en 1947, vendió los derechos comerciales a la compañía Haloid, que más tarde cambiaría su nombre por el de Xerox. Esta empresa introdujo la primera copiadora xerográfica automática a nivel comercial en 1959: sacó la primera copia en 15 segundos, y en 7,5 segundos las siguientes.

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